LA ABUELA DORMILONA
La abuela estaba frita
y yo quería tortitas.
Abuela, abuelita,
¿me haces tortitas?
Abuela, abuela
(como es un poco sorda, no se entera)
Probé más fuerte
a ver si había suerte.
Abuela, abuela
Y la abuela,
duerme que te duerme
Llevé el reloj de cuco
para despertarla de un susto
Cu-cú, cu-cú.
Abuela, abuela.
Cu-cú, cu-cú.
Y la abuela,
duerme que te duerme.
Estuve más de una hora
dándole a la taladradora.
Rrrrrrrrrr, Rrrrrrrrr.
Abuela, abuela.
Cu-cú, cu-cú.
Rrrrr, Rrrrr.
Y la abuela,
duerme que te duerme.
Como el asunto era serio,
avisé a los bomberos.
Niiiino, niiino.
Abuela, abuela.
Cu-cú, cu-cú.
Rrrrr, Rrrrr.
Niiino, niiino.
Y la abuela,
duerme que te duerme.
Fui a la granja en caballo
y me traje dos mil gallos.
Kikirikí, kikirikí.
Abuela, abuela.
Cu-cú, cu-cú.
Rrrrr, Rrrrr.
Niiino, Niiino.
Kikirikí, kikirikí.
Y la abuela,
duerme que te duerme.
Hasta desde el cielo
bajó un helicoptero.
Tacatacatá, tacatacatá.
Abuela, abuela.
Cu-cú, cu-cú.
Rrrrr, Rrrrr.
Niiino, niiino.
Kikirikí, kikirikí.
Tacatacatá, tacatacatá.
Y la abuela,
duerme que te duerme.
Como no podía entenderlo,
acabé llamando al abuelo.
Pero hijo,
me dijo.
La abuela es una princesa,
basta darle un beso
y suavemente se despierta.
Y así desperté a mi abuela
y me hizo la merienda.
¡Cómo me gusta que sigas conservando esa capacidad de ver las cosas como una niña y que nos permitas a los demás revivirlas al leerte! ¡Fenomenal! Bss.
ResponderEliminarPues a pesar de que tus poesías están dirigidas a un público infantil, principalmente, lo cierto es que a mi me parecen de lo más adultas, trabajadas y graciosas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Como se va interesando nuestro AMIGO por los temas infantiles, claro como va a ser padre en breve. besos amiguita.
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